¿Quién fabrica ahora los remontes para las estaciones de esquí en Rusia?

La invasión de Ucrania por parte de Rusia en febrero de 2022 provocó una escalada de sanciones por parte de algunos países, que obigó a que numerosas empresas europeas y norteamericanas se tuvieran que ir del país. Entre ellas los fabricantes de remontes, que perdieron de esta manera un mercado en pleno crecimiento.

Junto a las sanciones, también se impide que cualquier ciudadano ruso pueda viajar a Europa directamente. Todavía hay muchos que llegan para esquiar en los Alpes, pero tienen que hacerlo vía Turquía principalmente. Una incomodidad que ha hecho que muchos prefieran quedarse en casa e ir a las estaciones de esquí del Cáucaso principalmente, así como otras que se están creando en varias regiones de Rusia.

La cifra de esquiadores que están recibiendo las estaciones de esquí en Rusia está aumentando. También el fuerte crecimiento económico que registra el país, según el FMI superior a los de G7, hace que cada temporada más rusos se incorporen al mercado de turismo de esquí.

En una economía muy desigual, donde en Moscú o San Petersburgo los sueldos están a nivel europeo y el precio de la vivienda por las nubes mientras en las regiones de lejano oriente el nivel de vida es muy precario, el esquí y el turismo se quiere convertir en uno de los motores económicos para estas economías deprimidas.

Están creciendo nuevos proyectos por todo el país. Durante estos años desde la invasión rusa a Ucrania, las estaciones de esquí han tenido muchas complicaciones para comprar nuevos remontes, o incluso piezas de recambio que han tenido que ir comprando a través de la importación paralelo. Pero el Gobierno lleva meses tratando de poner trabas a este mercado de introducción de bienes, para que se compre a empresas locales.

El Ministerio de Desarrollo Económico ha impulsado la creación de empresas nacionales que fabriquen los remontes para las estaciones de esquí. Es así como ha surgido РУСЛЕТ (Ruslet CCL), un fabricante ruso que hasta 2022 trabajaba con Bartholet. Juntos etuvieron muchos años, y ahora con la retirada de la empresa suiza, otra compañía especializada en la fabricación de maquinaria para minería y transporte, adquirió las instalaciones y su tecnología.

Presentada a principios de febrero, ya han llegado a un acuerdo para suministrar los nuevos remontes de Arkhyz, también en las montañas del Cáucaso, y a medio camino entre la estación de esquí de Elbrús y las del gran area esquiable de 150 km de pistas formado por las estaciones de Sochi (Krasnaya Polyana y Rosa Khutor). 

Arkhyz, cuya construcción la inició el estado ruso en 2011, cuenta actualmente con 8 remontes y 27 kilómetros de pistas. El año pasado fue comprada por una empresa, con un acuerdo que incluye invertir en su ampliación y desarrollo. Hasta 2027 instalará seis nuevos remontes entre teleféricos y telesillas y crerará un mínimo de 30 nuevos kilómetros esquiables. El número de plazas hoteleras se incrementará hasta las 8.000.

Ruslet LLC se ha comprometido a fabricar y entregar a Arkhyz cinco de los seis nuevos remontes desembragables de última generación en 2026 para que estén operativos en diciembre de 2027. Ese año se entregará el séptimo aparato. El Ministro de Turismo explicó en el Foro de Turismo de Krasnaya Poyana que, 

Otra empresa que también está fabricando remontes para las estaciones de Rusia es ТверьКанатДор (TverKanatDor LLC). Tienen una fábrica en Moscú, pero se les ha quedado pequeña. Para 2025 esperan inaugurar otra en Tver, a 178 km de la capital rusa. Entre las dos plantas tendrán una producción de 20 remontes desembragables a año.

Aunque en la época soviética la URSS tenía una amplia experiencia en la fabricación de remontes por cable, desde la caída del telón de acero todo el mercado fue a parar a las empresas europeas. No obstante, siguen habiendo instituciones y universidades de donde salen ingenieros con experiencia en este campo, y con los que colaboran Ruslet y TverKanatDor.

Y de hecho, mucha parte del mercado que tiene por delante estas nuevas empresas de remontes, está en precisamente ir cambiando los obsoletos (y muchas veces peligrosos) teleféricos y telecabinas que todavía inundan muchas ciudades de Rusia. Se usaban mucho para el transporte urbano.

Y finalmente, otro actor en el mercado de los remontes en Rusia son los fabricantes chinos, aunque no han logrado entrar del todo. En estos 2 años desde las sanciones por la invasión de Ucrania, solo se han montado cuatro aparatos (todos telecabinas), todos ellos de BMHRI. Entre otras cosas por que los requisitos de seguridad que se piden en Rusia son muy estrictos. 

El turismo representa actualmente el 2,6% del PIB de Rusia y el objetivo es llevar esta cifra al 4,5% para 2030. En 2022 se registraron 73 millones de viajes en todo el país. El Ministerio de Turismo y Desarrollo Económico calcula que para 2030 el país podría recibir ya a 140 millones de turistas. El sector de la nieve para ese año, debería estar vendiendo 16 millones de días de esquí.

Según la Asociación de Estaciones, Territorios e Industria del Esquí de Rusia, hay unas 400 estaciones de esquí en el país. De ellas, 250 funcionan de manera estable. El resto suponen a veces un telecuerda en una colina. Se calcula que estos complejos invernales cuentan con más de 500 km de pistas de esquí.