En manos del comisionado está el futuro de Odúbel
CARLOS FIGUEROA RUIZ | CARACAS.- El incidente de violencia doméstica en el que se ha visto envuelto el jardinero de los Filis, Odúbel Herrera no pone en peligro su futuro con los Filis de Filadelfia, debido a que le adeudan casi $24 millones del contrato de cinco temporadas por $30 millones que firmó antes de la campaña de 2017.
Según reporte policial que maneja el diario Inquirer de Filadelfia, hay indicios de que Herrera incurrió en agresión física. “Quedaron marcas en el cuello y rasguños en los brazos de la mujer de 20 años de edad que dijo ser su novia, que le acompañaba en el Nugett and Casino Hotel de Atlantic City”.
Herrera fue colocado bajo la figura de licencia administrativa por siete días mientras se llevan a cabo las investigaciones. Para el 17 de junio fijaron audiencia en una corte de Nueva Jersey para responder a cargos de asalto y lesiones.
Una vez que finalice la investigación la sanción a Herrera quedará en manos del comisionado Rob Manfred. MLB y el sindicato de jugadores llegaron a un acuerdo en 2015, según el cual estos casos no tienen una guía específica de sanciones porque se manejan diversas variables.
Solamente uno de 12 bigleaguers involucrados en violencia doméstica desde 2016 quedaron en libertad: el pitcher zurdo venezolano José Torres, quien fue suspendido por 100 juegos y perdió la temporada de 2018, antes que los Padres lo dejaran libre endiciembre pasado.
Con los que le adeudan, para los Filis prescindir de los servicios de Herrera no será fácil, y otro conjunto no asumirá el riesgo de obtenerlo en un cambio. El escenario más apropiado pareciera ser sancionarlo con una cantidad determinada de juegos de suspensión, someterlo a un programa de rehabilitación y reeducación antes que retorne al equipo grande.
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