Pensaba que necesitaba un carnet especial para llevar una autocaravana grande, pero resulta que no hay que complicarse tanto

Quien empieza en el mundo camper suele hacerse las mismas preguntas: ¿Qué carnet necesito para conducir una autocaravana, una caravana o una furgoneta camper? Y son dudas lógicas, porque hablamos de vehículos grandes, más pesados que un turismo convencional y con normativas que no siempre están claras.
La buena noticia es que, en España y en gran parte de Europa, la regla general es más sencilla de lo que parece.
Contenido
El carnet B: suficiente para la mayoría de campers y autocaravanas
En España, con el permiso B (el de coche de toda la vida) se pueden conducir vehículos de hasta 3.500 kg de masa máxima autorizada (MMA) y con un máximo de nueve plazas incluida la del conductor. Esto cubre prácticamente todas las furgonetas camper del mercado y muchas autocaravanas compactas. Además, permite llevar remolques ligeros de hasta 750 kg sin necesidad de ningún permiso adicional.
Cuando hablamos de caravanas, sobre todo de las más pesadas, la cosa cambia. Si el remolque supera los 750 kg, entra en juego el límite del conjunto (vehículo + remolque). Con el B96 se puede llegar hasta 4.250 kg, lo que cubre a muchas caravanas familiares de tamaño medio. Para combinaciones que superen esa cifra se exige el B+E, pensado para conjuntos de mayor envergadura.
Por ejemplo, para llevar un SUV de 2.000 kg que arrastre una caravana de 1.200 kg el conjunto se sitúa en 3.200 kg de MMA, por lo que todavía vale el carnet B. Pero si esa misma caravana fuera de 1.500 kg, el conjunto subiría a 3.500 kg y ya entraríamos en el terreno del B96.


El mismo criterio del peso aplica a las campers y autocaravanas: mientras no superen los 3.500 kg de MMA, basta con el carnet B. Pero si rebasan esa cifra, entramos en otra categoría: hace falta un permiso de camión ligero (C1), válido hasta las 7.500 kg. Y si el vehículo pesa más, ya hablamos del C. Esta es la gran frontera que muchos usuarios valoran antes de dar el salto a modelos más grandes, porque obliga a sacarse un permiso superior.
Sin embargo, este año Europa ya ha dado el visto bueno a una ampliación histórica: el permiso B permitirá conducir autocaravanas de hasta 4.250 kg, aunque con una formación o examen adicional. La medida responde a la evolución del mercado (cada vez más equipamiento, más peso) y a una reivindicación histórica de asociaciones de caravanistas como ASEICAR, que llevan más de una década reclamando el cambio.
¿Cuándo entrará en vigor la nueva normativa?


El acuerdo se aprobó el pasado mes de marzo por el Parlamento Europeo y el Consejo, pero su aplicación no será inmediata. Según la Comisión Europea, la Directiva entrará en vigor 20 días después de su publicación en el Diario Oficial de la UE y cada Estado miembro tendrá cuatro años para adaptarla a su legislación nacional.
Esto significa que, en el mejor de los casos, podría aplicarse a partir de finales de esta década. Medios especializados y asociaciones del sector, como la European Caravan Federation (ECF), estiman que la fecha más realista es 2029, teniendo en cuenta los plazos legislativos y administrativos que suelen acompañar a este tipo de reformas.
Una ampliación histórica que cambiará el caravaning en Europa
Para el usuario, esta ampliación será una gran ventaja: permitirá acceder a autocaravanas más grandes y equipadas sin tener que sacarse un permiso de camión, lo que abre la puerta a viajar con más comodidad y carga útil. Además, unifica criterios a nivel europeo y da seguridad jurídica a quienes cruzan fronteras con su vehículo.


Otro punto clave es que beneficia directamente a los vehículos recreativos híbridos y eléctricos, que suelen ser más pesados por sus baterías y la tecnología que incorporan: con el límite actual de 3.500 kg muchos quedaban fuera del alcance del carnet B.
La única pega es el plazo: habrá que esperar varios años hasta que sea efectivo y, además, se exigirá una formación o examen adicional cuyos detalles aún no están definidos. En cualquier caso, el futuro apunta a un escenario más sencillo y adaptado a la realidad del caravaning actual.
Imágenes | Motorpasión, Unsplash
En Motorpasión | Hay un pequeño matiz entre pernoctar y acampar en una furgoneta camper, y es la diferencia entre disfrutar las vacaciones o volver cabreado a casa