«Me deshice de todos mis coches. Ahora me dedico más al arte». Lewis Hamilton se ha aburrido de la vida de ricos y ya no tiene supercoches carísimos

El quien te ha visto y quien te ve bien se puede aplicar a Lewis Hamilton. El piloto británico, el más laureado de la historia y que se ha estrenado con Ferrari esta temporada, se ha cansado de los coches. De tener un garaje con el que cualquier amante de los automóviles solo puede soñar a despojarse de todas sus monturas.
Lo ha señalado en una entrevista en la previa del Gran Premio de Azerbaiyán, que se celebra este fin de semana en el trazado urbano de Bakú. Aunque admite que tendría un last dance con un mítico Ferrari de calle por ser una obra de arte sobre ruedas.
«Si tuviera que comprarme un coche, sería el F40»
Precisamente el arte es la nueva predilección del siete veces campeón. Cuando le preguntaron si ha sido uno de los afortunados que se ha comprado el nuevo buque insignia de la marca de Maranello, el brutal Ferrari F80 culmen de su familia supercars, su respuesta asombró a los allí presentes: «Ya no tengo coches. Me deshice de todos mis coches. Ahora me dedicó más al arte».
Poco le importa a Hamilton que este híbrido de 1.200 CV sea el Ferrari de producción más rápido jamás concebido: no se ha dejado esos 3,6 millones en esta estupenda montura.
Adiós a una colección millonaria. Hamilton atesoraba una maravillosa y carísima colección de coches, que se estimaba en 13 millones de libras cuando estaba al completo. Y es que en realidad empezó a aligerar su garaje en 2019, entonces ya comentó que se había desecho de parte de su lujoso acopio. Ahora directamente ya no le queda ninguno.
Entre los que se le ha visto conduciendo, o posando en fotos incluyendo en sus garajes de Mónaco y Los Ángeles, encontrábamos por ejemplo dos Ferrari LaFerrari, el coupé y el cabrio Aperta, o un Ferrari 599 SA Aperta. En su paso por Mercedes también cosechó modelos AMG como un Mercedes-AMG SLS Black Series, un AMG GT R o un AMG G63 de seis ruedas. Y de la época de McLaren, el P1 y un McLaren F1 de 1995 (chasis 044) que compró en subasta por 15,6 millones de dólares.
Más allá de estos ejemplares, también fue avistado con un Pagani Zonda 760 LH y un delicioso Shelby Cobra 427 de 1966. O modelos mucho más mundanos como un MINI Cooper o un Mercedes EQC. De hecho, este último fue su montura recurrente cuando ya parece empezó a cansarse del lujo extremo: «Ya no conduzco ninguno de los coches que tengo. Solo mi Mercedes eléctrico (EQC)», cuando aún pilotaba para Mercedes, según recoge Reuters.
Solo el F40. Curiosamente, y pese a su deriva como activista medioambiental, el único coche que se compraría sería un Ferrari F40. Más por su valor histórico propio de una pieza de museo: «Si tuviera que comprarme un coche, sería el F40. Es una bonita obra de arte».
Precisamente al anunciarse oficialmente su fichaje por Ferrari, mencionó que le gustaría ayudar a diseñar un Ferrari de la serie Icona basado en «un F40, con la palanca de cambios manual. En eso trabajaré durante los próximos años». Le dio hasta un posible nombre: F44. De momento el único mítico Ferrari ochentero que ha resucitado es el Testarossa: el nuevo modelo tiene del original el nombre y poco más.
Del lujo al veganismo. Hamilton argumentó hace seis años que había vendido parte de su colección por conciencia medioambiental. Motivo por el que también se hizo vegano. Asimismo vendió su jet privado, un lujoso Bombardier Challenger 605 en rojo burdeos que compró en 2013 y con el que antes se desplazaba habitualmente. Aunque se señala que aquello tuvo más que ver por que se le asoció a los ‘Papeles de Panamá’ por su adquisición, en la que evadió impuestos.
No son buenos tiempos para el piloto británico: pese a que auguraba con Ferrari un tándem ganador (aunque miembros de la Scudería no lo tenían tan claro), no se ha estrenado en el podio en ninguna cita en esta primera temporada con el equipo italiano. «Ferrari debería cambiar de piloto, yo soy un inútil». Además, la cadena de hamburguesas veganas que abrió con Leonardo DiCaprio, Neat Burger, acaba de quebrar y han tenido que cerrar todas las franquicias.
Imágenes | Ferrari
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