La estación de esquí de Le Seignus también cerrará definitivamente
Por poco no han llegado al siglo de historia. En 1930 se colocó el primer telesquí. En 2025 los residentes de Allos acaban de decidir por una exigua mayoría que hasta aquí llegó Val d’Allos- Le Seignus.
Los miembros de los 5.000 hogares fiscales (los 600 residentes permanentes y los que viven en segundas residencias) de este pueblo del sureste de Francia tenían tres opciones para el futuro de esta estación de esquí cuya cota baja está en los 1.500 metros de altitud.
- Mantener el esquí alpino y aumentar los impuestos locales entre un 30 y un 35%;
- Mantener sólo una parte de Seignus y entonces aumentar los impuestos del 10 al 15%; o
- Detenerlos todo, parar los remontes para siempre y por tanto no repercutir impuestos.
Mayoría a favor de dejar de esquiar
Fue esta última opción la que logró el apoyo mayoritario pero por un exiguo 50,1% de los 1.342 vecinos que participaron en la votación, lo que supone que ahora el pueblo está dividido exactamente en dos bandos igual de grandes: los que sí querían seguir manteniendo la actividad del esquí y los que no.
En defensa de los que han votado que no, hay que decir que a la votación solo acudió el 30% de los vecinos fiscales. De todos ellos, el reparto entre las opciones fue de*:
- Un 36,4% mantener todas las pistas de esquí
- Un 12,6% mantener solo una parte del dominio esquiable.
*Datos aportados por AFP pero que como se puede ver parece tener algún error
Ante esta situación con dos bandos equitativamente repartidos pero teniendo en cuenta que solo el 30% del pueblo votó, el Ayuntamiento ha decidido tomar una decisión definitiva dentro de unos días. El alcalde de Allos, Michel Lantelme, dijo a AFP que «Los votantes han optado por una opción que nos proporciona una hoja de ruta».
Hay que tener en cuenta que este pequeño pueblo de tan solo 600 vecinos, tiene nada menos que dos estaciones de esquí. La otra es Foux D’Allos – Praloup (Espace Lumiére), un dominio esquiable de 180 kilometros de pistas a menos de 10 kilómetros del pueblo.
Le Seignus había sido donde nació el esquí en ese valle. El primer telesquí se colocó a pocos metros de la calle principal. Allí aprendieron los críos a esquiar al salir del colegio y los fines de semana en familia. Se llegó incluso a organizar unos Campeonatos Nacionales de esquí en la al parecer legendaria pista de Valcibière donde en 1989 ganó la leyenda francesa de Copa del Mundo Luc Alphand.
Pero la época dorada del siglo pasado. Hasta hace un par de décadas esta era una de las estaciones de esquí favoritas de los aficionados de Marsella, Mónaco y muchas ciudades de la costa azul y parte del sur de Francia. Ahora las comunicaciones han mejorado mucho. Las autopistas llevban a los Alpes en apenas unas pocas horas y la gente dejó de ir a estos complejos invernales, que además por su altitud están acusando el cambio en las temperaturas que se está registrando estos años.
Actualmente el Ayuntamiento tenía que destinar 700.000 euros al año de las arcas municipales para pagar deudas de la estación de esquí con proveedores y empleados. El año pasado se intentó incluso ampliar la actividad al verano, pero esto requiere también de cada vez mayor inversión en actividades para un tipo de turismo que gasta mucho menos que el del invierno. Y encima cada vez hay más competencia porque son muchos los complejos invernales que buscan desestacionalizarse.
Esta es la segunda estación de esquí que anuncia su intención de cerrar definitivamente después de que el pasado miércoles lo hiciera también la de Alpe du Grand Serre. El año pasado también en un espacio de siete días se despidieron nada menos que cuatro centros invernales, aunque la mayoría eran pequeños. El más grande fue Grand Puy, curiosamente al otro lado del valles de Le Seignus.
Un vistazo a Le Seignus: 3 telesillas, 2 telesquís y 23 pistas se detienen para siempre