14 octubre, 2025

LA ATLETA QUE SALVÓ LA VIDA DE SU PADRE – Historias de los Juegos

LA ATLETA QUE SALVÓ LA VIDA DE SU PADRE –

Melissa Jefferson puede haber ganado un oro olímpico -hasta el momento – pero destaca, o por lo menos para hablar de ella aquí, por algo mucho más grande. Sí, hay algo más grande que la gloria olímpica y es haber contribuido en gran (enorme) medida a salvar la vida de su padre. El padre de esta atleta estadounidense empezó a tener síntomas de su grave enfermedad en 2017, cuando contaba 58 años. Se sentía excesivamente cansado, por lo que acudió al médico. Los resultados de la biopsia que le realizaron fueron devastadores: padecía síndrome mielodiplásico que produce que las células productoras de sangre en la médula ósea se conviertan en células anormales. Es, en definitiva, una forma de leucemia.

Las esperanzas de vida de un paciente de esta enfermedad por desgracia son muy bajas y se requiere un trasplante de células madre. Se buscaron donantes pero sólo apareció como compatible su hija Melissa, que por entonces aún era menor de edad, con 17 años. Ella no dudó un momento en convertirse en la donante y, por tanto, salvadora, de su padre. “Quiero tener a mi padre cerca por mucho tiempo”, dijo entonces Melissa. Aunque fue advertida de que no tenía obligación alguna para convertirse en donante la futura campeona olímpica fue firme en su decisión. Para ello se sometió al proceso que consistía en recibir inyecciones durante varios días. Mientras su sangre fluía por la aguja las células madre pasaban a su padre yendo el resto de la sangre de nuevo al cuerpo de la donante. Salvó a su padre, que sigue viviendo tras superar un periodo de recuperación que consistió en 100 días de aislamiento. “Ella ha sido mi segunda oportunidad de vida y le estoy muy agradecido”, ha confesado orgulloso Melvin Jefferson en alguna ocasión.

Con sus padres

Vayamos con la carrera atlética de Melissa Jefferson, que es también destacable. Esta velocista ya es doble campeona mundial y oro olímpico en la misma prueba: los relevos 4×100. Pero no se limita a ello. Ha sido medallista olímpica en París 2024 a nivel individual en la prueba reina de los 100 metros, en su caso de bronce. Ya despuntó en la universidad, ganando títulos en el prestigioso campeonato de la NCAA. Melissa da un gran peso a la parte mental del deporte. Se motiva escribiendo negro sobre blanco sus aspiraciones para la temporada antes de que ésta comience y antes de las grandes citas atléticas tiene una “charla con Dios” que la llevan a una gran concentración y a centrarse en la carrera que toque en ese momento. Se podría decir, pues, que es una atleta “cerebral y espiritual”.

Melissa es tan popular en su localidad natal -Georgetown, Carolina del Sur, con una población de poco más de 8.000 habitantes- que le han dedicado un día a ella: el 12 de octubre es el “Día de Melissa Jefferson”, un honor del que no muchos gozan. Melissa Jefferson es aún joven (nació en 2001), por lo que aspira a hacer algo grande en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 28. Seguro que seguiremos oyendo hablar de ella.

Foto de Kevin Morris / @KevMoFoto



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