Jessica Pegula gana el WTA Berlín tras no jugar en tierra batida

Jessica Pegula ha aprendido a escuchar a su cuerpo y saber dónde puede darlo todo y dónde tiene que dosificar y descansar. La americana se hace en Berlín con su primer título en hierba tras salvar cinco bolas de partido ante Anna Kalinskaya y en su primer torneo después de perderse toda la gira de tierra batida por una lesión. De jugar un total de 78 partidos en 2023 a saber parar cuando hace falta.
Las características del juego de la americana la convierten en una tenista particular porque no posee las grandes armas que tienen el resto de jugadoras que se encuentran en el top 10, pero es ahí donde reside su gran misterio porque con su resistencia, su lucha y su variedad táctica es capaz de ganar a cualquiera en el circuito.
Su posición en el quinto puesto del ranking lo demuestra, pero también lo ratifica su regularidad. La americana acostumbra a llegar a rondas finales en muchos de los torneos en los que hace acto de presencia. Pero esto también fue un problema el año pasado donde llegó a disputar un total de 77 partidos, con 59 victorias, 18 derrotas y dos títulos.
– Las secuelas de 2023 le obligaron a parar
Pegula terminó completamente fundida al final de la temporada pasada, pero aun así llego a la final de las WTA Finals donde cayó de forma clara ante Iga Swiatek (6-1 y 6-0). Este desgaste físico le lastró durante el comienzo de esta temporada siendo su mejor resultado los cuartos de final en Miami, donde cedió ante Ekaterina Alexandrova (6-3, 4-6, 4-6) y unas semifinales en Charleston, inferior a Daria Kasatkina (4-6, 6-4, 6-7(5)). Una semana después ganaría sus dos partidos de la Billie Jean King Cup y fue entonces cuando aparecieron unas molestias en la costilla que se convirtieron en una fractura por estrés que le obligaron a parar y decir adiós a la gira de tierra batida.
“En un año tan loco con los Juegos Olímpicos en mitad del verano, prefiero estar lista para jugar la hierba teniendo en cuenta mi estilo de tenis, además del resto de la temporada en pista dura. La parte negativa es que he tenido que sacrificar toda la gira de tierra batida, lo cual tampoco sienta bien, pero teníamos que ir a lo seguro”, confesaba hace unas semanas la americana que tuvo en mente el intentar jugar el grande parisino. “Estuvimos entrenando pensando en jugar Roland Garros, pero al final fue todo demasiado pronto. Es verdad que llevaba sana unos días, si el torneo hubiera empezado una semana más tarde habría estado allí seguro”, recordaba Pegula, que esta vez optó por la paciencia y prefirió reservarse esas energías para la hierba.
“Sé que a largo plazo puedo jugar a un alto nivel, solo necesito algunos partidos para sentirme como una tenista de primer nivel, aunque reconozco que asusta ver a todas las rivales que van por delante de ti. Todavía tengo algo de ansiedad por haberme perdido tantos WTA 1000 este año”, confesaba al volver al circuito en s’-Hergotenbosch con una victoria y una derrota.
– Una semana ha tardado en recuperar el nivel
Por lo que aparecía en Berlín con el objetivo de seguir rodándose y llegar en las mejores condiciones posibles a Wimbledon, donde llegó a los cuartos de final la temporada pasada. Comenzó deshaciéndose de Donna Vekic (7-5, 6-4), se empleó a fondo para rendir a Katerina Siniakova (7-6(2), 3-6, 6-3), terminaba con su compatriota Coco Gauff en unas semifinales que duraron dos días (7-5, 7-6(2)) y en la gran final realizó un auténtico ejercicio de supervivencia remontando un set en contra y salvando nada más ni nada menos que cinco bolas de campeonato en el tercer set ante Anna Kalinskaya (6-7(0), 6-4, 7-6(3) . Consiguiendo así su primer título de hierba de su carrera y tras más dos meses de parón.
“Enhorabuena a Anna y a su entrenador. Habéis hecho un año estupendo y seguro que estáis jugando como jugadoras de élite. Seguid así. Siento que hoy haya ido como ha ido. Pero creo que hemos jugado a un nivel muy alto. Ha sido un buen partido. Lo dejamos todo ahí fuera”, aseguró la americana sobre la tenista rusa antes de confesar sus sensaciones de esta gran semana: “Es la mayor confianza que he tenido en una pista de hierba de cara a Wimbledon. Espero que también dé sus frutos. Ser capaz de aguantar un par de partidos y tener un par de partidos largos, especialmente para que el cuerpo se prepare, y lidiar con muchos de los retrasos por lluvia también. Eso siempre es posible en Wimbledon, así que fue una buena preparación mental”.
Pase lo que pase dentro de dos semanas en el grande londinense, Jessica Pegula ha vuelto a demostrar que no necesita de grandes golpes ni de un tenis agresivo para poder ser efectiva en hierba. Y confirma con este título que su físico le vuelve a responder después de haberse vaciado el año anterior. “Siento que he pasado por muchas cosas esta semana, así que, si he podido aguantar esta semana, creo que en Wimbledon me sentiré bastante bien«, avisa la americana que ha aprendido a saber cuando parar para después volver en las mejores condiciones para poder optar a grandes cosas ¿Será Wimbledon una de ellas?