Este triciclo eléctrico se pone a 120 km/h para que puedas ir dando pedales por la autovía. También tiene ISOFIX, por si te atreves a montar a tu hijo

Soy ciclista y me encanta moverme en bici… pero sólo para hacer ejercicio. En la ciudad donde vivo hay demasiadas cuestas, en verano hace mucho calor y en invierno hace mucho frío, por no hablar de lo incómodo que es utilizar la bici cuando llueve. Tampoco me siento seguro moviéndome entre el tráfico y no me fío absolutamente nada de dejarla en la calle.
Sin embargo, reconozco que dar pedales es una buena solución de movilidad urbana. No solo es sostenible, sino que también sirve para mantenerse en forma y para ahorrar porque el “combustible muscular” es más barato que cualquier otra cosa. Como no soy el único que piensa así, a una empresa francesa se le ha ocurrido desarrollar un vehículo para moverse a pedales, pero sin las desventajas de una bici.
Puede circular por autovía y tiene 160 km de autonomía
Se trata de la compañía Cixi y su invento se llama Cixi Vigoz. Es un triciclo híbrido porque combina los pedales con la energía eléctrica y tiene una carrocería cerrada, por lo que las inclemencias del tiempo no son un problema.
Además, es relativamente grande, así que tiene mucha más visibilidad entre el tráfico que una bici. Y aparcarlo tiene menos riesgo que dejar una bici en la calle porque se estaciona en aparcamientos convencionales, como un coche o una moto.


En su interior tiene dos plazas, con un asiento situado detrás del otro y anclajes ISOFIX en la butaca posterior, por si alguien se atreve a montar una sillita para llevar a su hijo (reconozco que yo no sería tan valiente). En el puesto de conducción no hay volante, sino un manillar con el que se gira y se frena. Para girar, el Cixi Vigoz inclina la carrocería.
Fuera del habitáculo, en la parte trasera del vehículo, hay un espacio de carga protegido con cinchas y un pequeño techo. Si hace falta más espacio, hay una trampilla para conectar este espacio con el habitáculo, donde se pliega el respaldo del asiento trasero. También puede llevar una baca, de manera que resuelve otro de los problemas de las bicis: la nula o casi nula capacidad de llevar cosas.


Una pequeña pantalla en el techo hace las funciones de ordenador de a bordo y bajo el suelo se esconde el arma secreta del Cixi Vigoz: una batería de 22 kWh que asiste al pedaleo.
Es lo mismo que una eBike, pero con una batería mucho más grande, lo suficiente como para garantizar una autonomía de 160 km y, sobre todo, como para permitir al Vigoz alcanzar una velocidad máxima de 120 km/h, de manera que se puede utilizar en todas las vías públicas, incluidas las autovías.
La batería se recarga en seis horas en un enchufe doméstico de 220 V, pero también puede recargarse con la frenada regenerativa y es posible ampliar la autonomía a base de pedaleo.


Como la velocidad máxima de este aparato es de 120 km/h, no se puede conducir sin carnet. En Francia es un vehículo de categoría L5, por lo que hace falta carnet de coche para conducirlo. En España también.
De momento, Cixi está afrontando la parte final de su programa de pruebas y el siguiente paso es homologarlo para que pueda rodar en la vía pública. Si Cixi lo consigue, lo fabricará en serie en Annecy, en Francia, y únicamente lo ofrecerá a través de suscripción, aunque todavía no sabemos a qué precio ni de qué forma.
Imágenes | Cixi