EL «REY» DE LA COMBINADA NÓRDICA QUE NO ESTARÁ EN LOS JUEGOS DE MILÁN/CORTINA – Historias de los Juegos

Poco antes de los Juegos Olímpicos de invierno celebrados en 2022 contamos que el máximo favorito para los oros en la modalidad de combinada nórdica era el noruego Jarl Magnus Riiber, dado su aplastante dominio en los campeonatos mundiales varios previos, así como en pruebas de la Copa del Mundo antes de esa cita olímpica. También advertimos que, no obstante, no podría participar en una de las pruebas individuales por no haberse podido clasificar para los Juegos de Pekín 2022 a tiempo debido a su ausencia en pruebas a causa de enfermar de coronavirus. En Pekín 2022 saltó la sorpresa: en la única prueba individual que disputó Riiber perdió la ventaja con la que contaba, ya en el segmento de esquí de fondo, debido a que se equivocó en el camino a seguir, realizando un giro erróneo, por lo que tuvo que dar la vuelta en cuanto se dio cuenta. Fue demasiado tarde y su puesto final fue el octavo. Aun así podría haber vuelto de Pekín con una medalla de oro en la prueba por equipos, puesto que esa prueba la ganó Noruega. Sin embargo, finalmente no tomó parte en el cuarteto escandinavo y, como consecuencia, Riiber se volvió de los Juegos sin medalla alguna.

Jarl Magnus Riiber ha sido por muchos considerado el mayor exponente de la combinada nórdica en su historia. De hecho, es el atleta de combinada nórdica con más medallas de todos los tiempos y en cinco ocasiones ha ganado el título global de la Copa del Mundo, es decir, el Globo de Cristal. Sin embargo, nunca logrará un oro olímpico. Lo afirmamos con rotundidad porque, pese a que tras los Juegos de Pekín ha seguido dominando su deporte ha decidido retirarse justo pocos meses antes de la celebración de los Juegos de Milán/Cortina. La noticia asombró a todos, pues de nuevo se daba por sentado su medalla, o más bien en plural. Con 27 años disputó su última temporada (la 24-25), en la que aún conseguiría varias victorias en pruebas de la Copa del Mundo. ¿A qué se debió, pues, esa repentina retirada?
Dos son las razones que expuso el noruego, siendo la primera de ellas una razón médica: tras entrar y salir en numerosas ocasiones de hospitales tratando de descubrir cuál era la causa de ciertos problemas de salud los médicos la encontraron: padece la enfermedad de Crohn, consistente en una inflamación del sistema digestivo con la que tendrá que convivir el resto de su vida. Le causa, además, dolor en las articulaciones y tendones. Riiber ha estado medicado durante un tiempo, lo cual paliaba en cierta medida los dolores, pero dicha medicación ha debilitado su sistema inmunitario. El atleta ha manifestado que durante mucho tiempo ha realizado esfuerzos y sacrificios para continuar compitiendo, con una gran nivel de dedicación. Incluso llegó a casi desmayarse en una prueba, bajando muchos puestos en las misma por esa causa.

Para preparar unos Juegos Olímpicos en los que se espera de uno que gane la preparación ha de ser especialmente dura. El cuerpo de Jarl Magnus no lo soporta. Porque, en su profesionalidad, está convencido que ir a unos Juegos en su caso es para ganar, no para arrastrarse o hacer un papel mucho peor de lo que se espera de él. “No estoy seguro de que mi cuerpo pudiera aguantar los sacrificios en la preparación de cara a unos Juegos Olímpicos”. Si a eso sumamos que el deporte de élite y las competiciones que le han llevado de un país a otro, ausentándose de su casa durante semanas, Riiber ha decidido que no le compensa. Quiere pasar más tiempo con su familia -su mujer y sus dos hijos de corta edad-, lo que supondría la segunda razón de su temprano retiro. Durante la temporada invernal puede pasarse meses sin verles. “Quiero centrarme en mi salud y en mi familia”, ha manifestado. Quiere, en definitiva, ser una figura presente en su familia a partir de ahora.
Noruega pierde unas posibilidades de medalla en los Juegos de Milán/Cortina: los aficionados (no solo noruegos), un ídolo; los Juegos de Milán/Cortina, un claro favorito, un dominador de su deporte con cifras estratosféricas al alcance solo de los grandes campeones de la historia. El gran personaje de la combinada nórdica se va sin haberse proclamado nunca campeón olímpico, ironías del deporte.
