El Aston Martin de Fernando Alonso ha pasado de peor coche de la F1 a rondar el podio en una semana. El problema es que ni ellos mismos saben por qué
Una semana. Hace solo una semana estábamos hablando de la hecatombe de Aston Martin. El equipo británico hizo en Spa su peor clasificación desde que corren en Fórmula 1 y fue la única escudería incapaz de puntuar. Siete días después, Fernando Alonso estuvo a escasos metros de hacer la pole en Hungría.
Podría pensarse que Aston Martin introdujo para la carrera húngara un nuevo paquete de mejoras, pero nada más lejos de la realidad. Apenas hizo unos retoques para ajustarse a Hungaroring, pero fueron suficiente para poner a Alonso en la mejor posición de la temporada, soñando con el podio. El problema es que nadie entiende por qué.
Alonso logró en Hungría su mejor resultado del año
Hay quien puede alegar que la diferencia de circuito entre Spa y Hungaroring es grande y que eso explica todo, pero jamás se había visto un cambio tan rápido sin mejoras aparentes. Después de ser los dos más lentos en Spa, tanto Alonso como Lance Stroll se quedaron solo a una décima de la pole position en Hungaroring. Un milagro formulero.
No fue cuestión solo de una vuelta. Todo el fin de semana, desde el viernes hasta el domingo, Aston Martin se mostró firme como el cuarto mejor equipo, incluso por delante de Red Bull. Alonso acabó la carrera en la misma quinta posición en la que empezaba, su mejor resultado del año, y bien pudo haber catado podio si los duelos de delante hubiesen tenido drama.
«Si me dices esto la semana pasada me habría reído de ti». Son palabras de Mike Krack, antiguo jefe de equipo de Aston Martin y actual ingeniero de la escudería. El luxemburgués alucinaba porque «normalmente no se salta del final del pelotón a la cabeza en siete días», y añadía que «tenemos que entender qué hemos hecho diferente respecto a Spa».
Es un problema que ha perseguido a Aston Martin desde que dieron el paso al frente en 2023. Ni cuando se subían al podio ni cuando dejaron de hacerlo entendían qué le pasaba al coche, y eso les llevó a un caos evolutivo en el que cada actualización parecía empeorar el coche. Ahora la historia parece repetirse.
El propio Alonso se sorprendía tras la carrera porque «este fin de semana no nos lo esperábamos, pero sabemos que los va a haber momentos mejores y peores. En los que el coche se adapta bien al circuito tenemos que acabar el trabajo nosotros en la pista, tanto en la crono como en la carrera, y sumar buenos puntos».
Hasta Stroll salió de su crisis para clasificar en tercera fila y sumar unos buenos puntos para el equipo, que ha subido dos posiciones de golpe y ya amenaza a Williams.
Imágenes | Aston Martin
