Caracas revivió en el clásico
Con goles de Farías y Garcés, el rojo se reconcilió con la victoria en casa ante nada más y nada menos que Táchira CARACAS.- Luego de varios partidos sin poder encontrarse a sí mismo en casa, el Caracas se agrandó en el clásico venezolano al doblegar (3-0) al Táchira en un partido sin colorido alguno, tras la ausencia de ambas hinchadas por una sanción en el Cocodrilos Sports Park de la capital.
Las primeras de cambio mostraron a un conjunto avileño que sin tener tanto la pelota pudo ser inteligente para desconectar los constantes embates de un aurinegro que hizo gala de su artillería pese a la ausencia considerable de Sergio Herrera.
Los dirigidos por Carlos Maldonado hallaron en la media distancia una gran aliada para crear peligro, ante la dificultad para ingresar al área con pelota dominada. Al minuto 12, Jorge Rojas -receptor y filtro de todas las pelotas en el medio- fue el primero en probar con un zapatazo que obligó a Fariñez a lucirse.
Pese al dominio del esférico visitante, la retaguardia falló al 33 al cometerle un penal a Robert Hernández, que una fracción más tarde aprovechó el artillero Edder Farías para concretar con un tiro cruzado e indescifrable.
Con el 1-0 arriba, el rojo se creció en confianza y mejoró el trato de la pelota siempre con la inteligencia de Reiner Castro presente para retener y distribuir la pelota en el área rival a la espera de Farías, o del apoyo de los volantes. El propio tachirense asustó a sus paisanos contrarios al 37 con un remate fuera del área que sacó José Contreras por encima.
En la segunda mitad el encuentro comenzó de forma arrolladora y apenas al 49, César Urpín se combinó con Castro en una jugada por la banda derecha que culminó en los botines de Robert Garcés y el carabobeño no dudó en sacar un derechazo cruzado que batió la red para el 2-0.
A través de la vía similar del contragolpe, el rojo dio el golpe final en la fracción 87 con una galopada de Sergio Córdova que le dejó la redonda a bocajarro a Farías, quien solo tuvo que darle un ligero toque para poner el abultado 3-0 con el que los capitalinos golearon a su eterno rival en un clásico sin el acostumbrado colorido en la tribuna.
Fuente: Líder en Deportes
