Cabrera reinventó su swing para aumentar los jonrones
CARLOS FIGUEROA RUIZ|CARACAS.- Aquel latigazo violento que ejecutaba con el bate para sacar la pelota con facilidad por la banda derecha, forma parte del pasado del bigleaguer Miguel Cabrera.
Por molestias en la rodilla derecha el experimentado toletero aragüeño de 36 años de edad se ha visto obligado a modificar su mecánica ofensiva para segur cosechando bambinazos, empeñado en convertirse, no más allá del próximo año, en el vigésimo octavo toletero que en la historia de las Grandes Ligas alcance la cifra de 500 vuelacercas, de la cual lo separan apenas 26.
El pasado jueves, después de empalmar el maderazo número 474 de su carrera, en encuentro contra los Marineros de Seattle, Cabrera admitió que está satisfecho con la modificación que se ha visto obligado a implementar en su swing para tener la oportunidad de jugar a diario. Quedó a un tablazo de alcanzar a los legendarios Stan Musial y Willie Stargell en el 31° lugar de la lista de jonroneros históricos de MLB
La lesión crónica de la rodilla derecha lo ha llevado de ser aquel artillero de swing aporreador que en nueve de sus primeras 16 temporadas disparó al menos 30 vuelacercas, a golpear la bola con estilo de golfista, colocando todo el peso sobre la pierna delantera, la izquierda que es la que está totalmente saludable.
“Admito, eso sí, que no puedo estar totalmente contento con este rendimento debido que el equipo no está ganando, este es un negocio de resultados”, expresó Cabrera, quien en 16 de los últimos 17 juegos de los Tigres hasta la jornada del jueves, exhibe promedio de .324 (de 68-22) con cinco dobletes, cuatro cuadrangulares y once carreras remolcadas.
El estacazo del jueves frente a envío del zurdo Tommy Milone, fue el noveno del año. Los cuatro más recientes se han producido en los últmos quince encuentros. Antes experimentó sequía de 15 juegos sin ligar jonrón hasta que el 29 de julio le sacó la bola por el centerfield al panameño Jaime Barria, de los Angelinos en la ciudad de Anaheim.
En lo que va de agosto suma tres maderazos, la cifra más alta en un mes en lo que va de campaña, mientras que también exhibe topes personales mensuales de 2019 en average al conectar de 52-16 para estupendo promedio de .308. Y todo producto de la reinvención del swing.
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