que no te pille otra nevada

Y es que actualmente las cadenas de nieve van mucho más allá de las habituales cadenas metálicas, pudiendo encontrar también modelos de fundas textiles, de TPU de distintas clases, con tacos, o de tipo red, e incluso existen productos en spray líquido que permiten ofrecer momentáneamente el agarre propio de unas cadenas sin necesidad de poner unas. Cada una de estas soluciones suele tener sus ventajas e inconvenientes, tanto a nivel de efectividad frente a la nieve o a nivel de resistencia, como sobre todo y especialmente nivel de facilidad de instalación, uno de los problemas más habituales entre los que se ven obligados a poner unas. Por no hablar de los precios, que especialmente en los modelos semiautomáticos se dispara a cambio de un diseño sólido y un sistema de instalación extremadamente sencillo pensado para esos conductores que suelen verse obligados a tener que conducir con cadenas habitualmente.

Ten en cuenta eso sí que, elijas el tipo que elijas, especialmente con las más habituales, estas cadenas no están pensadas para circular a velocidades normales, sino que por norma general no están pensadas para alcanzar velocidades de más de 50 km/h, aunque en cualquier otro caso conviene adaptarse siempre a las complicadas condiciones propias de una nevada o helada. Y por supuesto también deberás tener muy en cuenta dónde y cómo poner de forma adecuada las cadenas. Con todo esto sobre la mesa vamos a mostrarte las mejores, más interesantes y demandadas cadenas de nieve, en sus distintos formatos para que encuentres la más adaptada a tus necesidades y este año sí estés más que preparado para la siguiente Filomena.