este Airbnb es mitad sala de exposición, mitad vivienda turística
Los alojamientos turísticos pueden ser de lo más originales: desde cabañas en árboles hasta casas hobbit. Pero el propietario de esta vivienda que se puede reservar en Airbnb se ha pasado el juego en clave petrolhead: es a la par un museo de coches clásicos.
Se llama Frontier Vintage Station: «estudio-cueva de 127 m²», indica el anuncio en la descripción. Las fotos hablan por sí mismas, parece una sala exhibición de coches, pero puede alojar hasta tres personas.
Dormitorio con vistas a dos clásicos de punta en blanco
Esta estupenda máquina del tiempo nos traslada a los años 50 y 60 en todo su esplendor. Está en Gillette, una ciudad de Wyoming. No, no tiene nada que ver con la marca de productos de aseo masculinos. Pero su dueño, Jeff Wandler, fantasea con poner esta urbe en el mapa gracias a su museo. Y es que este alojamiento turístico es parte del complejo del Frontier Auto Museum que también regenta.
Como en casa en un museo. Los grandes protagonistas de este tan vintage Frontier Vintage Station son dos clásicos norteamericanos: un DeSoto de 1947 y una pick-up Chevy de 1949. Pero no es lo único que decora esta vivienda de alquiler única. Bonitos surtidores de gasolina antiguos, letreros de neón varios, una gramola retro con conexión Bluetooth y carteles de la cultura automovilística adornan la estancia.
Se combinan con el habitual equipamiento de un hogar de vacaciones: una cama de matrimonio, un sofá-cama, una pequeña cocina a juego con el rojo que domina el lugar en la que no falta una nevera retro o un baño completamente equipado están en el menú. También dispone una barbacoa y un patio en la zona posterior. Por supuesto, puedes aparcar gratis detrás.
Si te preguntas si te van a ver hacer los huevos revueltos por la mañana, no es así: puedes echar estores automáticos y tener total privacidad. Mientras no hay huéspedes en su interior, están subidos con los dos coches clásicos luciendo palmito. Para entrar, dispone de una caja de seguridad con código con las llaves dentro, como se estila en este tipo de alojamientos Airbnb.
«Auténticos unicornios». En una entrevista concedida al medio local Cowboy State Daily, Jeff Wandler da más detalles de los dos coches que se exhiben en este curioso museo-apartamento: «Son auténticos unicornios muy difíciles de encontrar en tan excepcionales condiciones», presume.
Asegura que el DeSoto, en color turquesa, nunca ha sido restaurado pese a lo bien que luce tras 80 años de vida. Se lo compró a su único dueño hace unos años, que lo mantuvo de punta en blanco. Una pequeña abolladura en la trasera, por un golpe en un aparcamiento, demuestra que se mantiene en su estado original. También el interior, que igualmente está impecable.
El otro «unicornio» es una preciosa pick-up Chevrolet del 49 que sí que ha sido restaurada. El mecánico que la puso como nueva falleció, pero su último deseo es que luciera en el museo de Wandler. De momento lo hace en este Frontier Vintage Station, aunque la intención de Wandler es comprárselo a la ahora viuda. «Es una restauración realmente profesional».
Un pequeño Disneyland del automóvil. Alojarse en esta curiosa casa incluye un pase gratuito al Frontier Auto Museum, que este entusiasta coleccionista levantó en lo que era un antiguo concesionario de Ford. Más allá del museo, está montando un pequeño complejo de viviendas turísticas como parte de su negociado. De hecho cuatro se anuncian en la web del museo y todas están junto a su edificio. Esta Frontier Vintage Station no se incluye de momento entre ellas. La razón es que la acaba de inaugurar, pero siendo la más llamativa no tardará en estar presente en el listado.
Imágenes | Jeff Wandler en Airbnb
En Motorpasión | Pasó toda su vida coleccionando coches raros y acabó creando uno de los museos más bonitos del mundo. Tras su muerte, 300 joyas únicas buscan dueño
