13 octubre, 2025

LA MALOGRADA CAMPEONA DEL BIATLÓN – Historias de los Juegos

LA MALOGRADA CAMPEONA DEL BIATLÓN – Historias de los Juegos

El verano de 2025 trajo una trágica noticia para el mundo del deporte, del biatlón en particular y del olimpismo en general. Contando sólo 31 años perdía la vida Laura Dahlmeier, una joven alemana que ya había hecho historia cuando se retiró del biatlón con 25 años.

Estaba predestinada a hacer algo grande en algún deporte de nieve, pues había nacido en Garmisch-Partenkirchen y su padre era alpinista y esquiador, mientras que su madre había sido ciclista de montaña. De hecho, de niña Laura se debatía entre el esquí alpino y el biatlón, deporte que probó cuando tenía siete años. Se acabó decidiendo -con buen criterio, vistos sus éxitos posteriores- por este último. Su primera medalla (en realidad dos) la ganaría en el Mundial Junior de 2011. Ese sería tan solo el inicio de una espectacular carrera. Imposible contar aquí todos sus podios. Para 2014 ya se convirtió en olímpica en los Juegos de Sochi, teniendo 19 años. Allí su mejor puesto fue el 13º, pero le esperaba la gloria olímpica en la siguiente cita.

Foto de AFP

Antes de llegar a los Juegos Olímpicos de Pyeongchang Laura se dedicó prácticamente a apabullar a sus rivales tanto en Mundiales como en pruebas de la Copa del Mundo. En la temporada 2016-17, sin ir más lejos, se convirtió en la número 1 del mundo y lideró la clasificación absoluta de la Copa del Mundo, así como las de las pruebas de persecución y la individual. Si Laura estaba presente, era altamente probable que ganara o quedara entre las tres primeras. Pero no siempre estaba, ya que resultó ser una joven enfermiza que hubo de saltarse demasiadas pruebas. Pero no eran sólo las enfermedades las que la impedían estar compitiendo, pues a eso se unieron accidentes de montaña, actividad a la que se dedicaba en cuerpo y alma desde niña, cuando su padre le metió el gusanillo de la montaña. En agosto de 2014 una caída subiendo el macizo de Zugspitz le desgarró el ligamento del tobillo derecho, pero Laura no abandonó el deporte del montañismo, sino que siguió subiendo montañas mientras corría paralela su carrera de élite en el biatlón.

En los Juegos Olímpicos de Pyeongchang de 2018 Dahlmeier culmina de la mejor de las maneras su palmarés. Su primera carrera era el sprint de 7,5 km. No realizó ni un solo error en el disparo. Oro para la germana. Dos días más tarde gana también en la carrera de persecución, permitiéndose esta vez fallar en un único tiro. Con esas dos victorias la alemana se convertiría en la primera biatleta en ganar en ambas competiciones consecutivas en Juegos Olímpicos. Asimismo se hizo con el bronce en la prueba individual.

Justo cuando Laura era dominadora absoluta del biatlón femenino (algo que ya había sido en el pasado) decidió retirarse. Fue en 2019 con 25 años, para a partir de entonces dedicarse en exclusiva a la montaña. Para empezar, se hizo guardia de aduanas, estudió Ciencias del Deporte y fue voluntaria en la guardia de montaña de su localidad natal, además de trabajar como guía de montaña y de esquí. Se dedicó a subir montañas, cada vez más altas y no solo en Europa. Por ejemplo, realizó la subida más rápida del Ama Dablam (Nepal, 6814 m) conocida por una mujer.

Y entonces llegó el accidente que le costó la vida. Fue en las montañas Karakoram que se encuentran en Pakistán, donde en un aciago día de finales de julio fue golpeada por una caída de rocas, que la hirieron fatalmente. Su compañera de escalada avisó a las unidades de rescate, pero el mal tiempo las demoró. Para cuando llegaron ya sería tarde e incluso no recuperaron su cadáver pues ella misma había dejado constancia de que renunciaba a un rescate de su persona si planteaba peligros para los rescatadores. El mundo del deporte y no solo la lloraron, desde la presidenta del COI Kirsty Coventry hasta el presidente de su país; desde el campeonísimo Felix Loch (luger con el que había compartido Juegos Olímpicos) hasta gente anónima que había compartido algún momento con ella. Los mensajes de todo el planeta se sucedieron. “Estar al aire libre es mi entorno natural. Me siento bien y viva aquí, incluso aunque lo haya pasado mal”, llegó a afirmar Laura Dahlmeier en alguna ocasión. Leer esas frases ahora, a posteriori, conocedores de lo que ocurrió, puede llegar a doler.

Nos quedamos con el lema que movió su vida, un dicho bávaro que ella hizo propio: “No tengas miedo, puedes hacer cualquier cosa”. Ella lo aplicó en toda su extensión.

Foto de Franck Fife/AFP



Ver fuente