Bosch va a despedir a 13.000 trabajadores

La crisis que asola la industria del automóvil europea no solo estrangula a las marcas de coches: también al sector de componentes. El gigante Bosch, el mayor fabricante europeo, acumula pérdidas de 2.500 millones de euros en su área de Movilidad, golpeada por la competencia china, que produce más barato, y la lenta adopción del coche eléctrico.
Su medicina para afrontar la debacle es la misma que la de Volkswagen o Stellantis: recortes en su plantilla. La empresa alemana acaba de anunciar el despido de 13.000 trabajadores, que se hará efectivo a lo largo de los próximos cinco años. Bosch dispone de varias instalaciones en España, entre ellas su planta de Aranjuez con 500 empleados.
Contenido
«Lamentablemente, no hay otra opción»
Bosch detalla que «las medidas de ajuste estructural y de personal son inevitables: la compañía prevé una reducción de unos 13.000 puestos de trabajo, especialmente en sus centros de Movilidad en Alemania». Los despidos se efectuarán hasta finales de 2030.
El mayor grueso de recortes lo sufrirán las áreas de Power Solution y Electrified Motion, especialmente en cinco centros de Alemania, donde se eliminarán más de 8.600 puestos. A estos se añadirán otros más de 4.300 en otros fuera de las fronteras germanas.
¿Afectará a Bosch España? Bosch solo detalla de momento el número de despidos de los emplazamientos germanos. En su histórica planta de Feuerbach, donde da salida a componentes diésel y de hidrógeno, recortará 1.500 empleos, a los que se añaden despidos en administración, equipos de desarrollo y ventas. En total serán 3.500 puestos de trabajo.
Se añaden otros del área metropolitana de Stuttgart como Schwieberdingen (1.750 trabajadores) y la planta de conectores de Waiblingen, que cerrará dejando sin empleo a 560 personas. Y otros dos alemanes: Bühl (1.500 empleados) y la fabrica de Homburg, dedicada a componentes de industriales diésel, que prescindirá de 1.250 trabajadores.


En esta hoja de ruta queda por detallar qué centros fuera de Alemania sufrirán los más de 4.000 recortes restantes. En España, Bosch emplea aproximadamente a 8.000 personas. A su división de Powertrain Solutions y de movilidad pertenece la factoría de Aranjuez (Madrid), con una plantilla de unos 500 trabajadores. Más pequeña es su factoría de Madrid capital, especializada en componentes para sistemas de asistencia a la conducción (unos 80 empleados).
Por ahora no hay noticias de si se verán o no afectadas. Todo dependerá de la estrategia que pretenda aplicar Bosch y si estos centros le son o no rentables.
«Mejorar la competitividad». La millonaria bajada de ingresos, según explica la compañía, apunta directamente a la transición tecnológica del coche eléctrico. Las condiciones del mercado «se han vuelto aún más desafiantes», señalan. «Necesitamos urgentemente mejorar nuestra competitividad en el sector de la movilidad y seguir reduciendo nuestros costes de forma permanente», ha explicado Stefan Grosch, miembro del consejo de administración y director de relaciones laborales. «Esto es muy doloroso para nosotros, pero lamentablemente no hay otra opción».
Bosch ha apostado fuerte en componentes de coches eléctricos, futuro de la movilidad, pero cuya adopción está siendo más lenta de lo esperado. También en concreto en tecnologías de pila de combustible de hidrógeno que es testimonial, incluso en industriales. Todo ello acuciado por la competencia llegada desde China, que ofrece baterías y electrónica a precios mucho más bajos.
Se añade además la guerra arancelaria. Aunque se ha rubricado un acuerdo para que los aranceles en las importaciones a EEUU desde Europa estén gravadas al 15 % (automóviles y componentes), desde el sector del automóvil en Alemania piden que la UE presione para mejorar las condiciones comerciales con Norteamérica. Y, en general, las pobres ventas de los coches en Europa, que aún no han remontado a los niveles pre-pandemia.


El sector agoniza por el coche eléctrico. Esta oleada de despidos en cinco años se enmarca en las previsiones de la patronal europea de los fabricantes de componentes (Clepa), que a principios de mes alertaba de que el sector perdería 350.000 empleos si no se toman medidas urgentes. Europa prepara un plan industrial que anunció esta primavera, con medidas proteccionistas que ayuden a «garantizar la competitividad del sector en un contexto de electrificación y transformación tecnológica».
No obstante, el sector ya está sufriendo estragos. Volkswagen también ha confirmado que suprimirá 35.000 puestos de trabajo en Alemania de aquí a 2030: su medicina para evitar el cierre de varias factorías alemanas. Es el 10 % de su plantilla. Stallantis ha prescindido de casi 3.000 trabajadores en todo el mundo, con 1.520 despidos en Turín (Italia) incluyendo cerca de 300 operarios de su planta de Mirafori. Ford confirmó en marzo el recorte de 1.000 empleos en dos de sus fábricas de vehículos industriales: Sandouville, en Normandía, y en la factoría de Moselle, donde no renovará contratos temporales.
La industria europea se tambalea con la imposición del coche eléctrico y la necesidad de cumplir con los límites de emisiones en un mercado que, aunque este año está mejorando, ha estado estancado. Los fabricantes europeos han solicitado formalmente a la UE que se revise la prohibición de la venta de coches con motores gasolina y diésel (lo que incluye híbridos) más allá de 2035. «En el mundo actual, simplemente ya no es factible». Auguran el colapso del mercado automovilístico europeo si se mantiene la prohibición.
Encuentra tu coche eléctrico ideal


Si te has planteado comprar un coche eléctrico, esto te va a interesar. Hemos creado el Recomendador personalizado de coches eléctricos en el que además de ver los modelos que se adaptan a tus necesidades también tendrás respuestas a las dudas que más te pueden preocupar como el precio, la autonomía o los puntos de carga cercanos.
Imágenes | Bosch
En Motorpasión | La gente no quiere Porsche eléctricos, así que la marca ha tenido que dar marcha atrás: los futuros Boxster y Cayman serán también gasolina