“A veces hacer falta perder para aprender algo”

Estuvo a una bola de conquistar Madrid por tercera vez, pero Aryna Sabalenka tiene ya ese nivel de madurez para quedarse con la parte positiva de las cosas. En su llegada al WTA 1000 de Roma, la bielorrusa dejó una rueda de prensa repleta de puntos interesantes.

Roma, próxima parada

“Estoy súper feliz de estar de vuelta en Roma, uno de mis torneos favoritos. En Madrid pasé por un par de semanas difíciles, por supuesto, el resultado de la final no era el que esperaba. Pese a ello estoy contenta con mi rendimiento durante esas dos semanas, así que estoy deseando empezar a jugar aquí”.

Resaca de Madrid

“Me llevo muchos aspectos positivos de Madrid, fue como competir contra mí misma, pero encontré mi juego. Allí fue donde volvió a juntarse todo y recuperé un nivel más alto. Tuve un par de batallas muy duras contra algunas de las mejores jugadoras y obtuve algunas victorias. Me quedé a un pasito de sumar un nuevo título, pero el tenis es así. Lo dicho, estoy feliz por esas dos semanas, tengo que empezar a gestionar así tanto las semanas buenas como no tan buenas”.

El valor de su equipo

“Siempre estoy muy cerca de mi equipo, son mi familia. Han estado conmigo pase lo que pase, tuve muchas situaciones difíciles, pero estuvieron siempre ahí, apoyándome y haciendo todo por mí. Trato de pagarles de la misma manera, estar ahí para ellos, darles lo que necesiten y ayudarles. Mi equipo es bastante grande, así que me siento muy cómodo estando con un equipo tan grande, somos una gran familia. Los siento como mi hogar, agradezco tenerles tan cerca, ellos hacen que todo esto sea posible. También es importante elegir a las personas adecuadas, en las que puedas confiar”.

El tridente Swiatek-Sabalenka-Rybakina

“Obviamente, Iga es mucho mejor en tierra batida que yo, por ejemplo. Diría que Elena es mejor en hierba. Tal vez yo me encuentre un poco más cómoda en pista dura. No puedo decir que todo se trate de la superficie, el tiempo ha demostrado que yo puedo vencerlas en arcilla, en cemento y en hierba. Se trata básicamente de un par de momentos clave en cada partido, ahí es donde gana la mejor. Por ejemplo, en el último partido con Iga, no diría que hiciera mal en esos cinco puntos clave, hice lo correcto, pero ella lo hizo un poco mejor. No todo es la superficie, es todo un proceso. Hay que aprender de esos errores que cometiste para luego trabajar en ellos y ser mejor la próxima vez”.

Tranquila con su última final

“Si hubiera perdido 6-0 y 6-0, seguro que me mantendría mucho más negativa durante un tiempo, porque sentiría que no lo hice lo mejor que pude, o que no hice todo lo posible. En esta final lo dejé todo, luché por cada punto lo mejor que pude, aunque dejé escapar un par de oportunidades. Al mismo tiempo, como dije antes, no es como si estuviera haciendo lo incorrecto, es que Iga lo hizo mejor que yo en esos momentos claves, pero la próxima lo haré mejor. Ese partido ya forma parte del pasado, hay que seguir adelante y trabajar un poco más”.

Gestionar la derrota

“Sufro un poco, pero también he roto la raqueta varias veces por no soportar esa emoción, pero luego estoy bien. Cuando era una niña también lloraba, me cabreaba, pero las emociones eran distintas. Lo que aprendí en el pasado es solo un impulso; ahora puedes perder, pero tienes miles de oportunidades para conseguir esa victoria. Es solo un impulso, hay que tener perspectiva, aceptar la derrota y seguir adelante, trabajar e intentarlo mejor la próxima vez. Si llegas a las últimas etapas de los torneos, pero es imposible ganar siempre. A veces es necesario perder para aprender algo, si te sucede en torneos grandes seguro que recordarás esa lección para toda la vida”.

Ni caso al ranking

“Recuerdo en 2018, cuando llegué por primera vez al top10, durante toda la temporada siguiente estuve pensando en defender esos puntos a finales de año. Estuve luchando mucho, no di lo mejor de mí, me frustraba mucho por pensar en el futuro y esas cosas. Después aprendí que esa realidad no importa, porque ese año defendí todos los puntos pero me quedé en el mismo nivel. Ahora mismo, si te va bien en unos 6-7 torneos, sabes que estarás en el top10, no tienes que preocuparte de los puntos. Tienes todo el año para hacerlo bien y luchar por llegar a la cima, pero todo esto viene con experiencia. Al principio luché mucho, eso sí, fui aprendiendo de esos detalles. Yo sé que si estoy lista física y mentalmente para jugar, lo haré bien y llegaré a las últimas etapas del torneo”.