Francia está retirando viejos remontes de esquí. ¿Cuántos quedan en España?

En 2020 Domaines skiables de France (DSF) se comprometió a desmontar 71 remontes en 47 emplazamientos detectados en el país. El objetivo es retirar viejos hierros de las montañas y devolverlas a su estado natural para que puedan ser disfrutadas con otras actividades.

La última de las estaciones desmanteladas ha sido Graou. Se trataba de un pequeño centro invernal creado en los años ’60. Entre sus clientes potenciales estaban los esquiadores de poblaciones de la costa azul como Niza.

Contaba tan solo con dos telesquís y tres pistas de diferentes dificultades (verde, roja y negra), así como 40 km para el esquí de fondo. La localización no era la adecuada. Por una parte su cota, a tan solo 1.000 metros de altitud, y su exposición al sol.

Junto a Graou fueron apareciendo otras estaciones de esquí. Una de ellas Varneige que también cerró. La oferta se ha concentrado en Greolieres les Neiges  y Audibergue gracias a las inversiones que han ido haciendo estos años lo que hizo incrementar una competencia que impidió hacer inviable las instalaciones.

Finalmente en 1990 Saint Auban – Graou anunció que ya no abría ese año. Después volvió a ponerse en marcha alguna temporada más, hasta que al finalizar la de 1994-1995 se cerró definitivamente. Las estaciones vecinas ‘canibalizaron‘ parte de las piezas de los remontes, y lo que no servía quedó en la montaña.

Desde 2016 es obligatorio en Francia desmontar los remontes que se encuentran abandonados. Son las propias estaciones de esquí las que deben hacerlo en caso de que todavía siga abierta, y en su caso, el Ayuntamiento correspondiente. Cuando se trata de un municipio pequeño y sin presupuesto, es DSF quién se encarga de los trabajos. Es el caso de Saint Auban, con apenas 250 vecinos.

Hace unos días, equipos y personal de varias estaciones de esquí: Praloup, Serre Chevalier, Valberg, Ancelle, Le Grand Puy, Isola 2000, Saint Jean Montclar, Réallon, así como las dos estaciones vecinas de Gréolières y l’Audibergue. También estaba Robin Deymier, vicepresidente de DSF. Desmontaron los dos telesquís y retiraron las cinco pilonas oxidadas que quedaban, hierros y cables que quedaban. También un edificio de recepción con un bar y la pequeña oficina de venta de forfaits.

Una de las pilonas estaba a tan solo 1.000 metros de altura, justo en la zona de aparcamiento de lo que actualmente es el parque turístico de Terre des Lacs, lo que desconcertaba a los visitantes que no imaginaban que a esa altura se practicase esquí años atrñas.

Actualmente Terre de Lacs es la puerta de entrada a actividades de aventura en verano como la escalada, descenso de barrancos, senderismo, etc… En invierno se sigue practicando el esquí pero de travesía y fuera pista, además de la escalada de cascadas de hielo.

En los últimos doce años (2010-2022), se han desmantelado 611 remontes en las estaciones de esquí francesas. Para los próximos meses, se actuará en otras 71 instalaciones abandonadas (67 telesquís y 4 telesillas), repartidas en 47 emplazamientos.

De todas ellas, solo en la región de Provenza-Alpes-Costa Azul, en concreto en las provincias de Hautes-Alpes Hautes-Alpes y Alpes-de-Haute-Provence, DSF tiene previsto 23 operaciones de desmantelamiento.

Remontes desmontados en España

El año pasado el Ministerio de Transición Ecológica desmanteló dos telesquís de la estación de esquí de Navacerrada que llevaban abandonados desde hacía varios años. El de Arroyo Seco se eliminó en octubre de 2022, y dos meses después a principios del mes de diciembre, se hizo lo mismo con el de Guarramillas.

Entre otros remontes en desuso desmontados estos años encontramos el telesilla de la estación de esquí de La Tuca, cerrada en los años ’80 y cuyos restos aún se podían ver desde la rotonda de Betren en dirección a Baqueira Beret. A finales del mes de abril de 2009 se desmantelaron todos los remontes que quedaban y los hierros se vendieron como chatarra al mejor postor.

Ese mismo año de 2009 pero ya en verano, fue Valgrande-Pajares quién dio el paso para desmontar los telesquís de su zona más baja. Los telesquís La Picarota, Abedules y Dulce la Dueña llevaban por entonces varios años sin ponerse en marcha y tampoco había intención de rehabilitar esa zona.

Con todo, todavía quedan remontes sin usar por nuestras montañas. Algunos muy viejos y de fabricación casi artesanal como el del Prado de las Pozas en la Sierra de Gredos (Avila), y otros que ‘claman al cielo’ como los de la antigua estación de esquí de Llessuí, cerrada desde los años ’80 y cuyos telesillas todavía se mantienen en pie.

Otros esperan a ver si alguien le da una oportunidad a la zona y se mantienen ahí guardando la linea. Para que en caso de volver a la vida, no sea más que una sustitución, y no una instalación nueva, con todo lo que eso conlleva en trámites. Es el caso del telesquí de Valle del Sol (Burgos) que lleva unos años especulándose su rehabilitación, o los de Rasos de Peguera, cerrada desde hace casi 20 años.

Antiguo remonte de la Sierra de Gredos.