El Ferrari más mítico de Michael Jordan llevaba más de 15 años desaparecido. Lo ha encontrado un español, y está milagrosamente intacto tras salvarse de un incendio

Durante años, el espectacular Ferrari 512 TR negro que Michael Jordan conducía en pleno apogeo con los Chicago Bulls se consideró el «Santo Grial» entre los coches de celebridades. Pero se le perdió la pista y su desaparición fue todo un misterio durante más de 15 años, hasta hace muy poco.
El mítico deportivo italiano ha sido encontrado en un estado increíblemente bueno tras sobrevivir a los incendios de California, gracias a una investigación liderada por el concesionario We are Curated, que ha documentado el hallazgo en un vídeo que no tiene desperdicio.
El Ferrari más legendario de los 90 ha vuelto, como el Ave Fénix
En los años 90, Michael Jordan era más que un jugador de baloncesto: era un fenómeno global. Y si había un coche capaz de igualar su nivel de carisma, era el Ferrari 512 TR negro que conducía por las calles de Chicago. Con la matrícula personalizada “M-AIR-J” y el bramido de su motor V12 de 4.9 litros y 428 CV, este Cavallino Rampante se convirtió en parte inseparable del imaginario colectivo de los fans del baloncesto y de los coches.
La historia de esta unidad es tan única como su primer dueño. Jordan lo compró en 1992 y lo vendió tres años más tarde a Chris Gardner, el empresario cuya vida inspiró la película ‘En busca de la felicidad’. Gardner, en un guiño irónico, cambió la matrícula a “NOT MJ” y conservó el coche hasta subastarlo en 2010 por 100.000 dólares.
A partir de ahí, el Ferrari desapareció sin dejar rastro. Durante 15 años, nadie supo nada más, alimentando rumores, mitos y hasta teorías conspirativas. Pero todo dio un vuelco cuando el concesionario especializado en clásicos de colección We are Curated, con sede en Miami y cofundado por el emprendedor español Jordi Ricart, decidió lanzarse a su búsqueda.
Gracias al número de bastidor y a una investigación digna de detectives, consiguieron rastrear al tercer propietario del coche: un coleccionista privado de California que, poco después de adquirirlo, fue diagnosticado con cáncer y dejó el coche parado en su garaje. Ahí es donde la historia vuelve a dar un giro que parece de guion de Hollywood.
A comienzos de este mismo año, los incendios forestales que arrasaron parte de California amenazaron también la casa del propietario. Milagrosamente, mientras todo a su alrededor quedaba reducido a cenizas, su vivienda y su colección de coches, incluido el Ferrari de Jordan sobrevivió. Según compartió We are Curated en Instagram, el coche estaba cubierto de polvo y ceniza, pero estructural y visualmente intacto.
Eso sí, tras 15 años sin moverse, la mecánica ha sufrido. Por ello, el equipo de We are Curated ha enviado el coche de vuelta a Maranello para una restauración integral que costará más de 200.000 dólares (unos 170.000 euros al cambio). Un homenaje merecido para un coche que, más allá de su valor como clásico, es una pieza viva de la cultura deportiva y automovilística de finales del siglo XX.
El futuro del coche aún está por decidir. Según el propio concesionario, planean organizar un emotivo reencuentro con sus anteriores propietarios y no descartan exponerlo en el Museo Ferrari, en Pebble Beach o incluso sacarlo a subasta. Las estimaciones más optimistas apuntan a que su valor actual podría superar el millón de dólares. Quién sabe, quizá el círculo se cierra y vuelva a manos de Michael Jordan.
Imágenes | @wearecurated