Así es Niels McDonald, campeón junior de Roland Garros 2025


🎾 Rinky Hijikata vs Daniel Evans
- Entra aquí y regístrate en Bet365
- Haz tu primer depósito de mínimo 5 €
- Entra en la sección «Directo» y ve todos los partidos
Ver partido en Bet365
Mientras todas las cámaras, periodistas y aficionados se agolpaban el pasado domingo en la Philippe Chatrier para presencia una de las mejores finales de todos los tiempos entre Carlos Alcaraz y Jannik Sinner, en la sala de prensa aparecía en la sala de prensa un joven chaval de 17 años con melena y con una sonrisa de oreja a oreja. Era Niels McDonald, el nuevo campeón junior de Roland Garros 2025.
«Estoy muy contento de empezar aquí entre todos los jugadores y acabar ganando el torneo. Es un honor, después de que probablemente muchas leyendas lo hayan ganado. Pero también es solo un paso más en un gran objetivo y un sueño que persigo y que empecé a perseguir hace años. Así que, sí, hoy o mañana podemos celebrarlo, pero al final también volvemos al trabajo. Seguiremos trabajando para poder jugar aquí en el gran escenario algún día. Pero, por supuesto, es un honor absoluto y un placer ganar este torneo, y estoy más que feliz de levantar el trofeo aquí», comentaba el alemán nada más sentarse en la silla junto a su título de campeón.
Aterrizó en París sin ser cabeza de serie y siendo su tercer torneo como profesional
Y es que McDonald, jugador diestro con una gran derecha, rompió todos los pronósticos. De hecho, el alemán estaba participando en su tercer torneo como tenista profesional y llegaba a París sin ser cabeza de serie. Superó las dos primeras rondas sin problemas, y ya en la segunda acabó con un cabeza de serie (Keaton Hance, número 16 por 6-1 y 6-3). Sin embargo, se dio a conocer en los octavos de final cuando eliminó al cabeza de serie número uno y principal favorito: Andrés Santamarta (que desde esta semana es el número uno junior) por 6-4, 3-6, 6-3.
Ya había terminado con dos cabezas de serie y le quedaban dos más: Theodor Alexandrescou, número siete (7-5, 6-2), y Ryo Tabata, número trece (6-2, 6-2). De esta forma se plantaba en la gran final ante su compatriota Max Schoenhaus. Pero el día antes de este encuentro decisivo, se fue con su rival a una peluquería junto al exjugador Philipp Petzschner, que llegó a ser número 35 del mundo, para que cumpliera con una promesa.
«Fue la apuesta al comienzo del torneo. Si uno de nosotros, los alemanes, gana el torneo, entonces sí, le hacemos un corte de pelo a su elección. Quiero decir, ya que los dos estábamos en la final, entonces uno de nosotros va a ganar. Sí, así que fuimos a la peluquería ayer a las 6:30. Reservamos una cita para él. Primero queríamos hacer como un corte de pelo de Avatar, como una flecha en su cabeza. Luego, viéndolo en directo, nos moríamos de risa. Luego terminamos sintiéndonos tan mal que dijimos: Está bien, aféitalo todo», aseguro entre risas.
A pesar de la buena relación que también tiene con Max Schoenhaus, Mcdonalds sufrió de lo lindo en la final. Perdió el primer set en el tie break, pero se rehizo y se mantuvo mentalmente para darle la vuelta y proclamarse campeón en París (6-7(5), 6-0, 6-3): «Estaba nervioso, por supuesto. Es un gran escenario. La pista también parecía más grande, así que es algo distinto a lo que habíamos jugado antes. Perdí un primer set muy igualado, pero también con algunas decisiones nerviosas que surgieron de la nada, algunas devoluciones poco inteligentes, algo de estrechez en algunos tiros. Pero al final lo perdí. Mentalmente, tenía que mantenerme ahí. Por supuesto, iba a dejarme el corazón en este partido. Entonces me dije a mí mismo: ‘Muy bien, ahora vamos a por más, ahora ponemos aún más energía, ahora golpeamos más las bolas’. Y acabó saliendo muy bien. Me sentí mucho más poderoso en el segundo y tercer set. Me sentía más yo mismo. Movía mejor las piernas. Entonces me dije a mí mismo desde el principio del segundo set: ‘Muy bien, puedo ganar esto, quiero ganar esto’. Así que hice todo lo que pude para conseguirlo», confiesa el alemán en una declaración que demuestra la gran fortaleza mental que posee con apenas 17 años.
Aparte de contar con la ayuda de Philipp Petzschner, su entrenador principal es el italiano Gianluca Marchiori, con el que entrena en Estocolmo, aunque este no pudo estar presente en el gran hito de su pupilo: “Llevamos trabajando juntos unos ocho, nueve meses, quizá. Estoy muy agradecido de tenerle a mi lado. Es un entrenador increíble, y estoy listo para el futuro con él y dar los grandes pasos. No está aquí porque que está tomando un pequeño descanso. Seguiré cuando esté en Estocolmo, porque vive allí y entrena allí conmigo. Todavía trabajamos en la academia. Así que, sí, ahora va a ser padre, y le deseo mucha suerte, por supuesto. Sí, así que nos tomaremos unos meses de descanso para que pase tiempo con su familia. Luego volveremos de gira cuando él se sienta preparado”.
Además, de ser alemán y entrenar en Estocolmo, también tiene influencia escocesa por su padrastro, al que le une una gran relación: “Ha formado parte de mi carrera tenística desde que empecé. Siempre ha estado a mi lado, y estoy súper agradecido de tenerle a mi lado. Toma decisiones críticas, pero al final siempre está ahí para mí, siempre me apoya. Si hay cosas en las que no estamos de acuerdo, al final él solo quiere lo mejor, por lo que estoy súper agradecido. Sí, estuvo aquí toda la semana apoyándome, lo que me hizo muy feliz y le agradecí, con mi hermano a su lado. Sí, fue absolutamente increíble tener a los dos aquí», concluye un McDonald que quiere hacer historia en el tenis alemán, ya que desde 1997 ninguno ganaba en Roland Garros, cuando Daniel Elsner se proclamó campeón en el cuadro principal. Y desde que en 2014 Alexander Zverev se hiciera con el título del Open de Australia Junior, ningún germano había ganado un Grand Slam junior. De momento, el joven de 17 años acaba de comenzar su carrera, pero no habrá que perderle de vista.